Allí mismo
cruzamos la N211, por un túnel peatonal que nos lleva justo a los pies de la
Picota y que rápidamente nos dice que nos sobra todo lo que nos habíamos puesto
de más.
Llegamos a su parte más alta y nos dirigimos
hacia la carretera CM210. Tras cruzarla, un camino nos llevará hacia la
legendaria torre de Aragón, que en sus mejores tiempos fue utilizada como torre
de vigilancia. Desde allí echamos un rápido vistazo a las maravillosas vistas del pueblo, que queda a nuestros pies.
Empezamos el descenso bajo la gruesa muralla que protege al castillo.
Desde allí, por una estrecha senda bajaremos hasta la casa del Val, donde tras cruzar un arroyo buscaremos otra que se dirigirá al antiguo circuito de motocross.
Allí nos espera una corta pero dura subida que nos llevará junto al término de Rillo de Gallo. A pocos kilómetros nos espera el primer avituallamiento, en un pequeño refugio forestal en el que antiguamente se hallaba la torreta metálica de vigilancia contra incendios.
En ese punto los más atrevidos continuarán su aventura hacia el Pie del Hombre. Los que han optado por la RUTA CORTA iniciarán el regreso por una preciosa senda (que habilitó nuestro amigo Sergio) donde constantemente nos veremos obligados a esquivar ramas, raíces, rocas... donde posiblemente algún corzo se sorprenda de nuestro apresurado paso.
Para aquellos que optaron por la RUTA LARGA comenzarán a descender por un camino, hasta el campo de tiro, desde donde empezarán otra subida hacia el Pie del Hombre.
Desde aquí tenemos un duro ascenso por
caminos y sendas hasta alcanzar la cota más
alta (1316mt).
En ese punto nos espera el segundo avituallamiento, para relajarnos y contemplar un maravilloso paisaje de las parameras molinesas.Tras el repostaje y breve descanso nos preparamos para afrontar la bajada, donde no perderemos de vista los enormes guijarros que nos encontraremos a nuestro paso.
Nos desviaremos en el segundo camino que sale a la derecha y poco más abajo otro camino y senda nos llevarán al Barranco del Toro.
Empezaremos a subir hacia donde se encontraba el primer avituallamiento, pasando antes por una antigua casa forestal ya casi en ruinas.
Al llegar al tercer avituallamiento nos
encontramos con el inicio de la Senda de Sergio, que nos bajará divertidamente
hasta la Casa del Val, para reencontrarnos con la senda que nos llevará otra
vez hacia los Castillos.
Continuamos por la cuesta de la nevera (Antigua
construcción subterránea donde se almacenaba nieve) hasta la muralla, volviendo
por el mismo camino para afrontar esta vez la dura subida a la Torre de Aragón. Aquí tenemos unas estupendas vistas del pueblo adornadas con
sus Castillos. Desde allí hasta la Picota tomaremos especial precaución al
volver a cruzar la CM210.
Aún nos queda la peligrosa bajada
de la Picota, en la que unas traviesas
de tren nos servirán de resbaladizos peldaños, que no perderemos de vista.
Una
vez abajo volveremos a cruzar la N211 por el túnel y en el parque de la Alameda
habremos terminado esta estupenda jornada en plena naturaleza, donde no
faltarán anécdotas que comentar con los compañeros de carrera.
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